Descubriste que eres celíaco, ¿eh? ¡Eso es algo muy importante! Después de más de diez años de trabajar con personas sin gluten y de no tener gluten, he notado algunos pasos para dejar de consumir gluten. Por diversión, anoté la lista.
Las ocho divertidas etapas del diagnóstico de celiaquía
1. ¡Ni siquiera me gusta el pan ni la pasta! Esta dieta será muy fácil para mí. Una brisa.
2. Entendí esto.
3. Espera… ¿en qué hay gluten? ¿POR QUÉ hay gluten en eso? No veo ninguna razón para ello.
4. No, en serio, debes estar bromeando. ¿Hay gluten en ESO?
5. ¿Por qué me siento enfermo después de pedir un bistec con patatas? ¿Por qué? (Alternativamente: este producto estaba marcado como sin gluten y juro que estoy reaccionando. ¿Estoy loco? Creo que podría tener gluten o estar loco. Quizás ambas cosas. ¿El gluten te vuelve loco? ¡Vaya, gluten!)
6. Está bien. ¡Eso es todo! Ahora estoy llevando comida a todas partes. No vale la pena enfermarse. No me importa si mi madre/hermana/compañera de trabajo me mira de reojo. ¡Me sentaré aquí con mi comida sin gluten y la disfrutaré, maldita sea!
7. ¿Un restaurante que entiende el contacto cruzado? ¿Y dijeron freidora dedicada? ¡Estoy enamorado! (Además: ¿un pasillo entero lleno de alimentos sin gluten de fabricantes confiables? INCREÍBLE).
8. ¿Sabes qué? ¡Tengo esto!
¿Cuál es la diferencia entre el número 2 y el número 8?
Experiencia. Aprendiendo la dieta. Cicatrización. Cometiendo errores. Al darte cuenta de que, Dios mío, echaste salsa sobre toda tu cena. Me lo comí. Me encantó. Y solo entonces recordé que tu mamá espesa su salsa con harina de trigo “Wondra”.
Como la mayoría de las cosas en la vida, es un maratón, no una carrera de velocidad. Honestamente, soy alguien que prefiere un sprint. Mi actitud muy a menudo es: “¡Abordemos esto! ¡Rápidamente! Y luego volver a nuestra vida habitual”.
Pero, como necesito aprender una y otra vez, la mayor parte de la vida requiere paciencia y resistencia como una maratón. En este momento, un diagnóstico de celiaquía significa seguir una dieta sin gluten de por vida. Sin trampas. Sin “días libres”. Entonces, si bien necesitas comer sin gluten, no con gluten ligero, tan pronto como te diagnostiquen, recuerda permanecer abierto. Hay mucho que aprender y, afortunadamente, una gran comunidad sin gluten estará encantada de compartir los entresijos contigo.
¿Cómo fue para ti dejar de consumir gluten?